El reflexionar es una acción fundamental para la transformación de nuestra propia vida y de nosotros mismos en lo que hace a nuestro Ser Interior. Es el reflexionar que trae consigo la sabiduría y no la acumulación de conocimientos. Podríamos ahorrarnos muchos sufrimientos reflexionando más y mejor antes de tomar una decisión.

Reflexionar significa detenerse, poner el pie en el freno (como dice mi amigo Santiago Antinogene en su libro GPS, un excelente coach argentino), observar, esperar, actuar en el momento oportuno. Tu próximo paso puede ser uno más pero también puede ser tu paso fundamental que cambiará el curso de tu vida entera; no siempre puedes saber de antemano su trascendencia. No obstante, el éxito de un paso dado con detenimiento y posterior a una reflexión puede ser mucho más certero que uno dado a las apuradas, reaccionando, como en “piloto automático”. ¿Quién te apura?

Sostengo que es parte fundamental de nuestra vida y es nuestra responsabilidad, es decir nuestra habilidad de responder ante las circunstancias que aquella nos plantea, el parar, reflexionar y actuar en consecuencia en forma totalmente consciente y asumiendo todas las consecuencias.